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Una Lianna Haroutounian magistral como Adriana Lecouvreur en Toulouse
24 de junio de 2025 |
Lianna Haroutounian ha demostrado una vez más su maestría vocal y escénica en el rol de Adrienne Lecouvreur, en la reciente producción del Théâtre du Capitole de Toulouse y así lo han plasmado los medios especializados.
Classique News se rinde ante la cantante armenio-francesa: "En el rol titular, la sublime soprano armenia Lianna Haroutounian – para nosotros, la cantante más bella del mundo junto a Anna Netrebko y Sonya Yoncheva – aporta toda su dimensión a la velada gracias a la fuerza de su interpretación. Más allá de la belleza intrínseca y el extraordinario resplandor de su voz, cautiva por la atención que dedica al texto, adornando su canto con acentos e inflexiones admirables, al servicio de una partitura concebida para grandes declamadoras: el célebre Monólogo de Fedra es aquí declamado con maravillosa sobriedad. El arte de Haroutounian es el de una cantante inmensa, de timbre generoso, acento sincero y emoción inmediata, alejada de todo artificio; es imposible no rendirse ante esta presencia vocal directa y poderosa, que en cada aparición brinda una felicidad sin reservas."
Culture 31 califica esta Adriana como "sensacional" y no puede resistirse a la presencia vocal auténtica de una gran dama como es Lianna Haroutounian: "La soprano armenia Lianna Haroutounian encarna a la perfección a esta actriz que se entrega por completo a sus emociones, mostrando desde el acto I la prestancia imperial de las grandes damas del teatro. Su firmeza se impone en los enfrentamientos con su rival. ¡Qué proyección! Y en el acto IV, resulta conmovedora con un “Poveri fiori” cantado con un aliento controlado y matices exquisitos. Su interpretación ofrece nuevas inflexiones, acentos inéditos que exaltan una partitura escrita para grandes declamadoras. Maravillosa sobriedad incluso en el monólogo de Fedra, timbre generoso, acento sincero y emoción inmediata, alejada de todo artificio. Es imposible resistirse a esta presencia vocal directa y auténtica, sostenida por una gran economía gestual. Con una encarnación así, todo lo demás solo puede estar a la altura."
Para Classic Toulouse, su fraseo lírico es de una belleza total: "Lianna Haroutounian conoce su Adrienne desde hace años y nos hace partícipes de su familiaridad con el personaje, impregnándolo de una emoción constante, magnificada por un soprano opulento que despliega frases líricas de gran belleza."
En Olyrix podemos leer: "Desde su debut en el rol de Adrienne Lecouvreur en Bruselas en 2016, la voz de Lianna Haroutounian ha ganado en volumen y claridad. Su soprano plenamente desarrollado se adapta con facilidad y valentía a la amplia tesitura de Adrienne: los agudos resplandecen con brillo y los graves se colocan sin forzar. Su fraseo concede un lugar privilegiado a la emoción y al amor desbordante que habita al personaje, especialmente en el Acto IV, cargado de intensidad. También sabe rebelarse frente a su rival. Haroutounian domina además el arte sensible de la declamación, como demuestra en el célebre Monólogo de Fedra en el tercer acto, detonante de la sed de venganza de la Princesa humillada."
Por su parte, para Forum Opera ha sido un absoluto deleite el trabajo de Lianna sobre las tablas: "El rol de Adrienne le sienta como un guante a Lianna Haroutounian – papel que ha interpretado como gran trágica desde hace varios años y cuyos retos y matices conoce a la perfección. La voz está sólidamente colocada, la proyección es segura [...] ofrece una interpretación magistral, especialmente en el Acto IV, sin duda el más logrado, donde su interminable agonía nos sumerge en un deleite absoluto."
Opera Online destaca su entrega sobre el escenario: "En el rol principal, Lianna Haroutounian se entrega por completo. El clímax llega con la muerte de la heroína, intensamente encarnada. Su emoción es visible cuando saluda sola, al caer el telón, ovacionada por un público conquistado. La línea de canto no muestra ninguna debilidad, y uno acaba respirando al ritmo de su fraseo, ante tal despliegue de expresión profunda y delicada."
Finalmente, Diapason se fija en su control e intensidad expresiva: "El reparto es el gran valor de esta Adriana Lecouvreur. [...] apasionada sobre todo, Lianna Haroutounian [...] da toda su medida a partir del segundo acto. Su auténtico spinto se despliega en toda la tesitura, con impecable control de la respiración, línea esculpida e intensidad expresiva. Una cantante de gran temperamento que alcanza su culmen en el acto III con el monólogo de Fedra lanzado a su rival, y en el magnífico acto IV con su inolvidable “Poveri fiori”."
Classique News se rinde ante la cantante armenio-francesa: "En el rol titular, la sublime soprano armenia Lianna Haroutounian – para nosotros, la cantante más bella del mundo junto a Anna Netrebko y Sonya Yoncheva – aporta toda su dimensión a la velada gracias a la fuerza de su interpretación. Más allá de la belleza intrínseca y el extraordinario resplandor de su voz, cautiva por la atención que dedica al texto, adornando su canto con acentos e inflexiones admirables, al servicio de una partitura concebida para grandes declamadoras: el célebre Monólogo de Fedra es aquí declamado con maravillosa sobriedad. El arte de Haroutounian es el de una cantante inmensa, de timbre generoso, acento sincero y emoción inmediata, alejada de todo artificio; es imposible no rendirse ante esta presencia vocal directa y poderosa, que en cada aparición brinda una felicidad sin reservas."
Culture 31 califica esta Adriana como "sensacional" y no puede resistirse a la presencia vocal auténtica de una gran dama como es Lianna Haroutounian: "La soprano armenia Lianna Haroutounian encarna a la perfección a esta actriz que se entrega por completo a sus emociones, mostrando desde el acto I la prestancia imperial de las grandes damas del teatro. Su firmeza se impone en los enfrentamientos con su rival. ¡Qué proyección! Y en el acto IV, resulta conmovedora con un “Poveri fiori” cantado con un aliento controlado y matices exquisitos. Su interpretación ofrece nuevas inflexiones, acentos inéditos que exaltan una partitura escrita para grandes declamadoras. Maravillosa sobriedad incluso en el monólogo de Fedra, timbre generoso, acento sincero y emoción inmediata, alejada de todo artificio. Es imposible resistirse a esta presencia vocal directa y auténtica, sostenida por una gran economía gestual. Con una encarnación así, todo lo demás solo puede estar a la altura."
Para Classic Toulouse, su fraseo lírico es de una belleza total: "Lianna Haroutounian conoce su Adrienne desde hace años y nos hace partícipes de su familiaridad con el personaje, impregnándolo de una emoción constante, magnificada por un soprano opulento que despliega frases líricas de gran belleza."
En Olyrix podemos leer: "Desde su debut en el rol de Adrienne Lecouvreur en Bruselas en 2016, la voz de Lianna Haroutounian ha ganado en volumen y claridad. Su soprano plenamente desarrollado se adapta con facilidad y valentía a la amplia tesitura de Adrienne: los agudos resplandecen con brillo y los graves se colocan sin forzar. Su fraseo concede un lugar privilegiado a la emoción y al amor desbordante que habita al personaje, especialmente en el Acto IV, cargado de intensidad. También sabe rebelarse frente a su rival. Haroutounian domina además el arte sensible de la declamación, como demuestra en el célebre Monólogo de Fedra en el tercer acto, detonante de la sed de venganza de la Princesa humillada."
Por su parte, para Forum Opera ha sido un absoluto deleite el trabajo de Lianna sobre las tablas: "El rol de Adrienne le sienta como un guante a Lianna Haroutounian – papel que ha interpretado como gran trágica desde hace varios años y cuyos retos y matices conoce a la perfección. La voz está sólidamente colocada, la proyección es segura [...] ofrece una interpretación magistral, especialmente en el Acto IV, sin duda el más logrado, donde su interminable agonía nos sumerge en un deleite absoluto."
Opera Online destaca su entrega sobre el escenario: "En el rol principal, Lianna Haroutounian se entrega por completo. El clímax llega con la muerte de la heroína, intensamente encarnada. Su emoción es visible cuando saluda sola, al caer el telón, ovacionada por un público conquistado. La línea de canto no muestra ninguna debilidad, y uno acaba respirando al ritmo de su fraseo, ante tal despliegue de expresión profunda y delicada."
Finalmente, Diapason se fija en su control e intensidad expresiva: "El reparto es el gran valor de esta Adriana Lecouvreur. [...] apasionada sobre todo, Lianna Haroutounian [...] da toda su medida a partir del segundo acto. Su auténtico spinto se despliega en toda la tesitura, con impecable control de la respiración, línea esculpida e intensidad expresiva. Una cantante de gran temperamento que alcanza su culmen en el acto III con el monólogo de Fedra lanzado a su rival, y en el magnífico acto IV con su inolvidable “Poveri fiori”."
© Mirco Magliocca